Él contestó- Mi querida niña, cuando se ha logrado alcanzar las estrellas justas que requería la diadema, nos queda subir de nuevo a la barca, poner la brújula al norte... al este no, porque muchas embarcaciones se han perdido queriendo buscar un atajo. Y navegar... hasta alcanzar la fuente de luz.
Así que Mary, subió de nuevo a la barca, puso la brújula al norte y dejando un haz de colores a su paso emprendió de nuevo el vuelo al universo...
SZYV MÁRQUEZ.