31 ene 2014

Dal-Canto

Hoy me llamaré abundancia.
La lluvia queda por testigo:  el mar será la extensión de mi nada.
Un puño de aliento bastará para llenar mil graneros de estrellas.
Ni el desierto se salvará.
Las dunas servirán de refugio, el sol temblará de nostalgia.
Cubriré la espiral con piedrecillas verdes, transparentes, 
que cantarán :

"élvez
spirál
bőség..."

Szív Márquez










élvezi a spirál a gazdagság

Las 12 en punto.

   La puerta estaba entreabierta, vio unos pies que traían puestas unas sandalias moviéndose por debajo de la puerta de aquella habitación, ...