Sin soltarnos, vistiendo de lluvia, truenos, sueños y relámpagos.
Nos encontramos en el eco. Inmune, vaga el corazón de la Tierra.
Voces corren, sangran en tumulto. Pulsos fugaces golpean.
El mundo hoy viste de violencia. Noche, préstanos tu vestido de estrellas.
Día-sombra, grito, pesadilla. Buscando con fe una luz.
Allá, tras la montaña escarpada nos perdemos en el laberinto.
Blanco-negro, frío-calor, relampagueante rastro de sol.
En Dante, no solo el infierno existe, también se encuentra el paraíso.
Necesitamos crear un ciclorama color río, vital.
Y respirar el azur en nuestro espacio. Tiempo-sangre, tiempo-negro.
Manos sol, a derramar sobre esta historia un gran frasco color cielo.
¡Pintemos la noche de zarco, las voces de edén!¡Nuestro palpitar azul!
Poema antalogado en el segundo aniversario de Un Cafe con Literatos. Ediciones Pastora. Madrid (España) MMXI
Nos encontramos en el eco. Inmune, vaga el corazón de la Tierra.
Voces corren, sangran en tumulto. Pulsos fugaces golpean.
El mundo hoy viste de violencia. Noche, préstanos tu vestido de estrellas.
Día-sombra, grito, pesadilla. Buscando con fe una luz.
Allá, tras la montaña escarpada nos perdemos en el laberinto.
Blanco-negro, frío-calor, relampagueante rastro de sol.
En Dante, no solo el infierno existe, también se encuentra el paraíso.
Necesitamos crear un ciclorama color río, vital.
Y respirar el azur en nuestro espacio. Tiempo-sangre, tiempo-negro.
Manos sol, a derramar sobre esta historia un gran frasco color cielo.
¡Pintemos la noche de zarco, las voces de edén!¡Nuestro palpitar azul!
Poema antalogado en el segundo aniversario de Un Cafe con Literatos. Ediciones Pastora. Madrid (España) MMXI
No hay comentarios:
Publicar un comentario