9 jul 2012

La última nube

Regresó por aquél túnel, abrió la puerta y en el mundo parecía haber transcurrido cerca de 20 años. Sacudió la cabeza, lo que para ella había sido un día eran muchos años más. Intentó adaptarse a su nueva condición, el entrenamiento de aquel día le servía y mucho.  Tenía que formar el rompecabezas una y otra vez. Cuando encontraba la pieza que completaba la última nube en el cielo, se movía la del pez en el mar. Se dio cuenta de que el mundo era un círculo, una continuidad. Ella estaba ahí atrapada intentando sostener el cielo y completar el mar.


Szív Márquez

Realidad etérea

  No hay neblinas blanquecinas  ni miel surgiendo a borbotones justo a mitad del plexo. Solo un espejo translúcido elevándose hasta la perpe...