3 jun 2016

Mi abuelo vive en el azul del cielo bajo el sol brillante y la esperanza de vida. Habita en el campo, escondido dentro de las semillas que me recuerdan sus manos morenas, en la tierra fresca y en los ríos. A veces se acerca como espíritu de fortaleza y alcanzo a distinguir sus ojos risueños ante las bromas cotidianas. Lo descubro en mi sonrisa al escuchar el canto de las aves y la lluvia que cae alegrando el  alma. He llegado a sospechar que es también la paz desbordante ante la maravilla del universo, de vez en cuando el viento trae su voz como si quisiera compartir conmigo un poco de cielo...
Mi abuelo Agustín Ramírez vive, vive en este vals y al escucharlo mi corazón canta... canta y baila ...

SZÍV MÁRQUEZ

Realidad etérea

  No hay neblinas blanquecinas  ni miel surgiendo a borbotones justo a mitad del plexo. Solo un espejo translúcido elevándose hasta la perpe...